¡Hola mundo!
Estamos en Noviembre, debería ser otoño, aunque las temperaturas no dicen lo mismo!Pero en los mercados ya han aparecido desde tiempo las verduras de temporada: broccoli, coliflor, col y calabaza por supuesto! La reina de las verduras otoñales!
Me gusta muchísimo esta verdura que tiene distintos utilizo en cocina, tanto para platos salados que dulces, a causa de su especial sabor.
Hoy os quiero enseñar esto sencillo plato:
CREMA DE CALABAZA con queso CACIORICOTTA
Las cremas de verduras son unos de mis platos invernales preferido: sencillo, rápido y sano! Las hago con casi todas las clases de verduras y las combino con pescado o con queso...mmm, son super ricos!
Ademas, es una forma de comer verduras que les encanta también a los niños/as, así que tenéis que probarlas!
El cacioricotta es un queso típico del sur de Italia, precisamente del tacón de la bota, la región Puglia. Es muy difícil de conseguir aquí en España, lo que he utilizado lo he traído directamente de Italia.
La particularidad de este queso, a parte su textura, es su sabor suave y al mismo tiempo salado. Se crea así un contraste en el paladar entre el cacioricotta y el sabor dulce de la calabaza.
De toda forma podéis utilizar tranquilamente el queso parmigiano y quedará buenísima igual!:)
La calabaza que he utilizado para este plato estaba muy sabrosa y fibrosa y la cosa mas bonita es que venia directamente de la huerta de mi compañera de piso...¡100% biológica y a Km 0! Aun mejor! ;)
La receta:
- 1/2 Calabaza
- 2 patatas
- media cebolla
- queso cacioricotta o parmesano
- trocito de pan frito o tostado
- romero
- pimienta negra
- sal
- aceite de oliva extra virgen
Poner a sofreír la cebolla cortada en trocitos en el aceite. Cuando está dorada juntar la calabaza y las patatas peladas y cortadas en tacos, dar una vuelta a todos los ingredientes y luego agregar agua hasta cubrir odas las verduras. Salar, poner el romero y esperar que las verduras estén blandas. Pasar todo al triturador de inmersión y servir en platos poniendo los trocitos de pan, el queso rallado, un espolvoreo de pimienta negra y un chorrito de aceite...
¡que provechen!
